Escudo cortado. Primero de oro tres fajas de gules. Segundo de plata tres encinas de sinople. Al timbre corona real cerrada.
Encinas Reales es una localidad de la provincia de Córdoba, Andalucía, España. Ocupa una posición geográfica céntrica y privilegiada en Andalucía, siendo equidistantes cuatro capitales de provincia Córdoba, Málaga, Granada y Jaén. En el año 2019 contaba con 2.279 habitantes. Su extensión superficial es de 34,21 km² y tiene una densidad de 67,14 hab/km². Sus coordenadas geográficas son 37º 16' N, 4º 29' O. Se encuentra situado en la comarca de la Subbética Cordobesa, a una altitud de 445 metros y a 87 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba.
Encinas Reales es un municipio joven que nació como tal en 1836, cuando se emancipó de Lucena. Sin embargo, sus orígenes se remontan al siglo XVII, y restos romanos hallados en Las Mersillas nos hablan de su remoto pasado. Así, las casas empezaron a amontonarse en su actual enclave hacia principios del siglo XVII, siendo los primeros habitantes de Encinas Reales agricultores lucentinos que venían a trabajar los campos de los duques de Medinaceli para que así los habitantes de la nueva aldea no tuviesen que ir a Lucena a cumplir con la Santa Madre Iglesia. Lentas debieron ser las obras, pues no se concluyeron hasta 1814, casi dos siglos después de iniciadas. En los parajes hubo encinas antiguamente, de ahí el nombre, pero el primitivo fue Encinas Ralas, que da a entender que estos árboles estaban muy separados o ralos. La razón de este aspecto tan disperso se debe a las continuas talas de esos núcleos de encinas durante las guerras de los cristianos contra los musulmanes del Reino de Granada. Con el tiempo, el adjetivo se fue metamorfoseando hasta convertirse en el Reales actual, que concede a la villa más alcurnia e importancia y con el que se relaciona una leyenda que cuenta cómo Doña Isabel la Católica, yendo de viaje, descansó a la sombra de unas grandes encinas que allí había.
De plata, cruz de Santiago, de gules, flanqueada por dos crecientes ranversados de azur. Bordura componada de ocho piezas de Castilla y León. Al timbre, corona real abierta.
Espejo es un municipio español de la provincia de Córdoba, Andalucía. En 2019 contaba con 3329 habitantes. Su extensión superficial es de 56,64 km² y tiene una densidad de 60,2 hab/km². Se encuentra situada a 33 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba, en la comarca de Campiña Este
En el solar de Espejo se asentó, durante las épocas íbero-turdetana y romana, la ciudad de Ucubi, de gran importancia debido a su emplazamiento estratégico. Se ha tenido conocimiento recientemente de la existencia de un recinto fortificado, ubicado en el Cerro de la Pontanilla. El abastecimiento hidráulico de la colonia se lograba mediante un acueducto cuyos vestigios se localizan en terrenos de Nueva Carteya, Castro del Río y Espejo. También se localizan numerosas cisternas o depósitos en algunos puntos de la actual ciudad. Mencionar la construcción romana en sillería de El Aljibe de carácter cultual a poco más de un kilómetro de Espejo. Recientemente se ha encontrado otra Aljibe en perfectas condiciones junto a la Fuente de la Fuensanta, donde hubo una ermita-satuario a la misma advocación mariana, por lo que cabe pensar que fue la continuación de un antiguo santuario romano. Dado el gran número de fuentes similares alrededor de la población, cabe pensar que podrían encontrarse más monumentos de este tipo.
La población íbera asentada en estas tierras con el nombre de Ucubi fue ocupada por los romanos, que le cambiaron el nombre por el de Attubi. Desde el siglo xvi los arqueólogos vienen interesándose por tan glorioso pasado romano, a partir de las inscripciones descubiertas en su término. Durante la batalla de Munda, entre Julio César y Pompeyo, prestó su apoyo a César, que la recompensó haciéndola colonia inmune y añadiendo al nombre de la colonia su propio nombre anteponiéndole Claritas Julia. De Ucubi, Espejo, procedía la familia paterna del emperador romano Marco Aurelio, nacido el 26 de abril del año.
Bajo el poder musulmán —luego del dominio visigodo— muda Ucubi, o su latinizado Attubi, su nombre por el de Al-calá, topónimo árabe alusivo a la fortaleza que coronaba este asentamiento.
Más tarde, sobre las torres derruidas conocidas como Torres de Pay Arias, un descendiente de dicha familia, Pay Arias de Castro, propietario de aquella heredad, levanta un castillo a finales del siglo XIII
En 1303, Fernando IV le concede el privilegio de repoblación de aquel lugar, que por voluntad real pasará a denominarse Espejo:
... y porque el su castiello a que solian decir Alcala a quien nos tovimos por bien mudar el nombre y quel digan Espeio
Este nombre no es más que una mala traducción del latín de Specula, que, como Alcalá, significa fortaleza o castillo.
Espiel
En campo de gules, un castillo de oro mazonado y aclarado de sable. A sus pies un león rampante de sable.
Espiel es un municipio español de la provincia de Córdoba, Andalucía. En el año 2019 contaba con 2.397 habitantes. Su extensión superficial es de 437,26 km² y tiene una densidad de 5,69 hab/km². Sus coordenadas geográficas son 38º 11' N, 5º 01' O. Se encuentra situado en la comarca del Valle del Guadiato, a una altitud de 548 metros y a 50 kilómetros de la capital de provincia, Córdoba.
Espiel es conocido por contar con una de las mejores zonas de escalada deportiva de Andalucía y por haber sido el lugar de descubrimiento de la campana más antigua de España.
Su estratégica ubicación en el centro del valle del Guadiato influyó sobremanera en el asentamiento protohistórico en las tierras de Espiel, encontrándose una gran cantidad de yacimientos del calcolítico, del megalítico, etc. Destacan los asentamientos de La Estrella, La Alhondiguilla o El Vacar, y el hallazgo de un ídolo-placa en serpentina verde con diversos grabados.
Los primeros indicios de civilización corresponden a la época romana. En la localidad estuvo asentada la población de Siciliana, quedando restos de su asentamiento como monedas o sepulcros.
Posteriormente, tras las invasiones de los pueblos germánicos, resulta importante reseñar la existencia del conjunto arqueológico de "El Germo", constituido por una basílica y un baptisterio visigodos, erigidos hacia el 600 d. C.
La época islámica nos ha legado el castillo musulmán de "El Vacar". Se trata de una fortaleza de la época califal construida en tiempos de al-Hakam II y que Fernando III donó a Córdoba en el 1237.
Tras la Reconquista, Espiel pasó a pertenecer al señorío de Córdoba y, ya en el año 1546, Pedro Sánchez de Sepúlveda ganó una provisión para que la villa tuviese alcalde, alguacil y escribano. De ese modo se evitaban las molestias originadas a sus vecinos cuando tenían que ir a Villanueva para sus negocios y otorgamientos de escrituras. En el siglo XVII fue comprada por Juan Jiménez de Góngora, luego marqués de Almodóvar de Trasserra.
Los vecinos espeleños dan crédito a la tradición de que el pueblo se remonta en sus inicios a unas chozas (hechas por unos cabreros en los actuales asentamientos de la villa), las que después se convirtieron en casas que se fueron amontonando poco a poco, aunque no se precisa en qué momento.
Este territorio estuvo en la antigüedad muy poblado de aldeas, contándose además los asentamientos de algunos célebres monasterios de cuyos edificios se conocen aún las ruinas, parte de las cuales pertenecen al término de Villaviciosa.
Durante el siglo XIX, al calor de la actividad minero-industrial que se desarrolló en la cuenca carbonífera, se produjo el desarrollo económico de la zona. También se produjo la llegada del ferrocarril a la comarca, buscando dar salida a la extracción del carbón. En 1873 entró en servicio la línea Córdoba-Belmez, que contaba en Espiel con una estación de ferrocarril propia. Esta dinámica se mantuvo hasta la segunda mitad del siglo XX, en que la actividad minera y ferroviaria decayó.
A finales del siglo XX y principios del XIX, además de la tradicional economía agrícola y ganadera, se desarrolló una importante actividad industrial en los sectores metalúrgico, maderero, de elaboración de gres y transformación del plástico, en los cuatro polígonos industriales de la villa. En el sector terciario destaca también un incremento de los servicios turísticos y de ocio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario